7 de septiembre de 2011

El mundo se acabará pronto y aún no eres capaz de ingresar al registro

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Iba a surgir una causa. Primero la causa, luego el efecto, en matrices divinas. Hay un color. No puedo describirlo. La iglesia primera tuvo que ser moldeada a imagen y semejanza de una forma original. La cruz, las dimensiones de su nave, la rúbrica impresa en su sello. La Iglesia reunía a la gente para transmutarle una nueva velocidad, Ahí adentro el tiempo y el espacio se fundían en un sólo self colectivo. Los sacerdotes se encargaban de generar un campo energético, los moldes, las barreras, como partituras chinas, para sincronizar la energía. En términos más simples, lo que ahí se hacía era un envío de energía a un ser indescriptible.

¿Qué es el registro?

Una flor inexistente, un espacio sin tiempo, una nave espacial sin tripulantes y a la deriva, un castillo medieval proyectado holográficamente sobre un océano de lava. Un transmisor de datos sin destinatarios específicos, la tenue vibración de la música de las esferas, un truco de magia que no posee mecanismos ocultos (un truco sin truco), el sueño de Kublai Kahn soñado antes de que existiera Kublai Kahn, millones de cartas sin destinatarios.

¿Qué es el ser?

Un acto de violencia.