15 de septiembre de 2011

Dos creadores

Francis Roseway Fontberry, especialista en culturas orientales, visitó en un apartado lugar de la ciudad al maestro Tzu Beth. La entrevista comenzó con una breve ceremonia de iniciación, que incluía comida, infusiones de hierba y mucha risa. Luego le pidió el maestro que emitiera sonidos guturales e ininteligibles, para que de esta forma, pudiera vaciar su conciencia. Francis, un poco consternado, emitió algo avergonzado unos ruidos tímidos y casi inaudibles. El maestro se subió arriba de la mesa y pegándose en el pecho como un simio, comenzó a gritar e imitar a un chimpancé. Francis, preso de la risa, se desvaneció en medio de la nada junto con la casa y el maestro.
Más tarde se supo que Francis y el maestro Tzu eran una invención de Pablo Rumel. Pero Rumel también había sido inventado por este par -que se decía de manera oculta- eran en realidad dos animados artistas del mundo flotante.